Más que una moda, la economía circular es la nueva forma que se debería producir si es que se quiere disminuir el impacto en el medio ambiente de manera significativa. Descubre estos cuatro ejemplos de economía circular de Falabella para reducir, reutilizar y reciclar sus residuos.
Lamentablemente la forma de producir del último siglo no ha sido sostenible lo que ha llevado a rediseñar un nuevo tipo de economía, una nueva forma de producir y de consumir.
A diferencia de la economía lineal (comprar, usar y botar), la economía circular busca cambiar la mentalidad sobre los residuos y la gestión de estos considerando el fin de vida del producto desde el momento del diseño de este. En vez de generar desechos, estos son reducidos, reciclados y reutilizados como insumos para otras o la misma industria.
Por un lado, puede ser una empresa que utiliza sus propios desechos como insumos o, por otro lado, puede ser una empresa que utiliza desechos que están disponibles de otras industrias. Por ejemplo, la empresa chilena Karün fabrica anteojos, pero en vez de utilizar materiales vírgenes, le pagan a locales por recolectar redes de pesca y así, de paso, limpiar las playas. Estas son recicladas y las transforman en marcos de los anteojos.
De esta forma, la economía circular es un tipo de economía más sostenible, ya que considera el triple impacto: social, económico y medioambiental desde el momento del diseño. En un proyecto de economía circular bien estructurado las empresas pueden disminuir sus costos al utilizar residuos como materia prima, ahorro que se puede traspasar al cliente.
En el caso de Falabella Retail, en el 2019 implementamos lineamientos de circularidad dentro de nuestras operaciones. A través de cuatro proyectos de economía circular logramos reducir los desechos, recuperándolos como materia prima e incorporándolos nuevamente a la cadena productiva.
Los residuos plásticos son reciclados y transformados en bolsas que se re inyectan a la operación. Hasta ahora se logran producir 500 mil bolsas mensuales. Gracias a esta iniciativa, hemos podido recuperar 344 toneladas de polietileno. Además, con esta medida los costos de adquisición de las bolsas operacionales disminuyeron entre un 5% y 7%.
A través de una campaña con la marca Americanino, recuperamos residuos textiles de denim para ser reutilizados y reciclados. En total fueron 1.330 kilos de jeans, de los cuales 480 kilos fueron transformados en ecorelleno y el resto se transformaron en bolsos comercializados por Americanino..
Dado el uso intensivo de colgadores de ropa, esta estrategia nos permitió reducir en un 15% los costos en ganchos nacionales de las marcas propias de Falabella. De esta forma, se reutilizaron 30,5 toneladas de colgadores.
Ahora que sabes en qué consiste la economía circular y cómo puede ser aplicada en proyectos de estrategia de circularidad como también en emprendimientos, ¿te animas a crear una iniciativa para darle un nuevo valor a los residuos?
Son varias las marcas que han emprendido a través de la economía circular. Algunas de estas las puedes encontrar en el Mercado +Verde como Lup que crean productos a base de plástico reciclado o como Convictus que reutiliza elementos que fueron transformados en desechos para vender lámparas.